Que gusta en nuestra ciudad, y más en el mundo capillita, un
titulo o un nombramiento, tanto monta…
Como ya sabéis, el llamado movimiento de “Hermanos
Costaleros”se inicia a finales de la década de los 60, y se concreta a partir
de los 70, si bien ya había habido salidas con hermanos en Hermandades de
Gloria, en nuestra Semana Santa no se
concreta hasta 1973, cuando en Los
Estudiantes, cuaja una cuadrilla de hermanos bajo la dirección de ese genial y gran capataz, Salvador Dorado “El Penitente”, por el mundillo cofrade fue recibido como
algo anecdótico, existiendo una corriente que consideraba aquello, como el esnobismo de unos cuantos, pues quiera que no,
en la Sevilla de entonces y en la de antes, el costalero, era un mero
asalariado, de clase muy baja, y que buscaba unos ingresos extras que aliviaran
su maltrecha economía, sin ver que eran personas, que si bien es cierto
realizaban trabajos muy duros y mal pagados en su vida cotidiana, lo que motivaba que estuvieran encuadrados en
un muy bajo nivel social, eran gentes que vivían, sentían y amaban nuestra Semana Santa, mucho
más que muchos de afuera, y que os digo como experiencia propia y como
costalero que he sido, que jamás se habrían metido debajo de un paso por un
salario, había mucho más en ellos que un sentido crematístico.
Lo que parecía una “pirada” de unos cuantos “iluminaos”, y
tras un año de verlas venir, dio pie a que en 1975, se rompiera la pana, y
brotaran 5 hermandades con cuadrillas de hermanos costaleros, incluso alguna de
ellas llevando los dos pasos de la Cofradía, si la memoria no me falla, fueron
las siguientes hermandades: La Hiniesta
( los 2 pasos), El Amor, San Esteban (
los dos pasos), Pasión y el Gran Poder, amén de Los Estudiantes.
El Alcalde de
Sevilla, por aquel entonces, D. Juan Fernández Rodríguez - García del Busto (
muy vinculado a la Hermandad de Pasión, de la que llego a ser Hermano Mayor),
encabezó una iniciativa con vistas a reconocer la labor callada y sorda de los
costaleros de Sevilla, organizando un homenaje del Ayuntamiento a dichas
personas, y concediéndoles a todos los que estaban en activo en ese momento el
titulo o nombramiento de COSTALERO DE SEVILLA, para la ocasión se celebró un
lunch en el Puesto de los Monos, se efectuaron entregas simbólicas del Diploma
y Carnet que acreditaba de dicho título, ya que por el elevado número de
personas concentradas a la puerta del citado restaurante ( no cabíamos a un
pico por cabeza, la cerveza era una entelequia) , optaron por entregar a cada
capataz, los correspondientes a cada uno de los miembros de su cuadrilla, para
que se lo hicieran llegar.
Curiosamente también fueron citadas las cuadrillas de los
hermanos de las Hermandades, antes citada, y que salvo el caso de Los
Estudiantes, en la fecha que se realizó el evento, es cierto que entrenar habíamos
entrenado “tela”, pero ninguno había sacado aun a la calle su Cofradía, por lo
que siempre me resulto algo extraño, que se nos agasajara y reconociera al lado
de unos hombres que lo habían demostrado sobradamente.
Nuestro entonces Alcalde y el Ayuntamiento, considero que se
vieron venir, el vuelco que con los años se consolidaría en nuestra Semana
Santa, con casi un pleno de cuadrillas gratuitas en la actualidad, y quisieron
reconocer en tiempo y forma el merito de estos hombres
Siempre me quedará la duda, de que el citado nombramiento y
homenaje, se hubiera celebrado si no se detectará que las cuadrillas de
hermanos-costaleros, empezaban a abrir brecha de forma muy contundente.
Sirva este blog de hoy, de homenaje a aquellos costaleros,
que fueron tan poco reconocidos y que tanto nos ayudaron a los que empezábamos,
cierto es que durante los primeros años de las cuadrillas de hermanos, hubo una
fuerte movida por parte de los capataces y costaleros, para intentar frenarlas,
pero todo quedo en un calentón, porque es imposible ponerles puertas al campo,
y al final como es habitual en la gente de abajo, todo quedo en un abrazo y
vamos a tomarnos una cerveza, que te explico…..
Saludos bofeteros